De Siripa a Haripa


Jairo López, hijo mayor de Marco Tulio, entra a formar parte de la banda de Payuco tocando el redoblante a la edad de nueve años. Pronto aprende a tocar trompeta bajo la guía de su padre y también clarinete guiado por su abuelo. De ese tiempo de muchacho le viene el sobrenombre de Siripa.

Una vez que la primera generación de López abandonó la banda Parroquial, el Cura del pueblo convocó nuevos músicos. Jairo entra a dirigirla acompañado por sus hermanos y familiares. Esto dura sólo un año porque el Cura les exige pagar por cuenta propia un director profesional, además del pago a la Parroquia. Obligado a entregar los instrumentos, además de los uniformes que habían ganado y partituras que habían heredado, Jairo buscó alquilar los instrumentos que tenían sus vecinos los Salesianos. De manos del P. Santiago Beltrán los reciben y desde el colegio salesiano se vienen tocando en procesión hasta la casa de su abuelo Álvaro en Payuco. Ese sábado 4 de mayo de 1975 la Banda de Payuco nace de forma independiente de la Parroquia. Don Antonio García, el autor de "Cejeñita" es el primero en contratarlos para llevar una serenata a su madre. Así se convierten en la banda preferida del pueblo para todo tipo de fiestas, sagradas y profanas.
Siguiendo la tradición familiar Jairo promueve en sus hijos el amor por la música y empieza a enseñar solfeo a su hijo William, quien después de seis meses de practicar el clarinete hace méritos para ingresar a la banda. John Iván entra después tocando el trombón y luego Ricardo.

Ricardo López, Haripa sobrenombre que al parecer evoluciona del de su padre, representa un aire nuevo para esta banda de vientos. Su proceso formativo en la Banda Sinfónica de La Ceja bajo la dirección del maestro Juan Felipe Arias, de quien aprende la disciplina y la perseverancia que exige el arte musical, representa el puente que lo llevará del instinto popular al rigor de la academia. Con los estudios que comienza en la U. de A. en 2002 y se gradúa como Maestro Trompetista en 2009, de la mano del maestro Fernando Parra, con el apoyo de maestros internacionales como Eric Aubier, Francisco Flores, Germán Paniagüa, Carlos "Batanga", Fernando Avendaño, Fernando Rodríguez y Germán Murcia.

Bajo la dirección de Ricardo la Banda de Payuco entra a una nueva era musical, sus partituras y sonidos se depuran en conceptos y calidad. Además de esta enorme tarea de continuar con una tradición ya centenaria, Ricardo hoy participa de otras experiencias musicales, como ya lo ha hecho con agrupaciones como Emsamble Antioqueño de Trompetas, Emsamble "Puropueblo", Quinteto Brass de Medellín y Frenesí Orquesta.